Discriminados por su origen étnico

La discriminación por motivos raciales se extiende en Francia. Un inmigrante que quiera conseguir un trabajo en el país galo se enfrenta a una posible discriminación por su origen étnico. Y el riesgo aumenta en el sector privado donde la selección de personal se realiza mediante candidaturas y currículums. Este tipo de prácticas se desprende del informe elaborado por la Alta Autoridad de Lucha contra las Discriminaciones y para la Igualdad (Halde), organismo oficial independiente, que desveló que de las casi 8.000 demandas recibidas durante 2008, el 29% procedían de personas que denunciaban discriminación por su raza, convirtiéndose en la primera causa de trato diferencial y perjudicial de quienes pretenden ejercer en Francia.
Pero esto no nos tendría que sorprender cuando es el propio Sarkozy quien está moviendo sus fichas para conseguir la legalización de las "herramientas estadísticas" necesarias para llevar a cabo un "censo étnico" de la población.